lunes, 28 de octubre de 2013

El mito de la transpariencia y la participación ciudadana

Hay palabras que se ponen de moda y se vacían de contenido. Una de ellas es la de transparencia y otra la de participación, al menos en lo que a Getxo se refiere.
Este fin de semana he leído en el periódico que el municipio de Getxo está entre los más transparentes del estado y, además, que aún lo va a ser más porque abre nuevas vías de acceso de la ciudadanía a través de Internet, concretamente de la web municipal.
Mi primer pensamiento fue "Si Getxo es de los más transparente, ¿cómo serán los demás?". Pero, en realiadad, me da igual si Getxo es el tuerto en el país de los ciegos; si es la conclusión a la que ha llegado una empresa -financiada o no por el propio consistorio- que se limita a aplicar cuatro parámetros de medida o si es tan sólo una proclama vacía... Lo peor es que hay quienes se deleitan en esa complacencia y se echan a dormir... Ya está, tenemos un título que nos da credibilidad. Somos los más transparentes porque así no los dicen y poque lo creemos... No nos importan que gran parte de nuestras vecinas no se lo crean o se hayan enterado al leerlo en la prensa...
Todas las semanas leo el Getxoberri, el boletín municipal de este municipio tan transparente, y tengo la sensación de que no vivo en el mismo pueblo que me presentan; bueno, sí..., pero es que yo no participo de muchas de las informaciones que aparecen -la mayoría actos institucionales en los que participan algunas fuerzas políticas y ciertas ciudadanas y ciudadanos implicados- sino es a la distancia. No siento palpitar un pueblo vivo y multicolor, sino  información/propaganda, que a veces no sé dónde comienza una y acaba la otra. De la radio..., mejor ni hablamos.
En los plenos, las ciudadanas podemos hacer oír nuestra voz de manera directa, aunque sea al final y siempre fuera del acta, no vaya a ser que lo que digamos sea registrado y leído. Ni siquiera tenemos derecho a réplica -y cuántas veces se queda una con ganas de responder...-.
Es verdad que en la web y en las OIC podemos registrar nuestras quejas, sugerencias..., pero por desgracia no tenemos ninguna constancia de que se tengan en cuenta salvo cuando responden  a los intereses o línea programática de quien está en el poder. Si no es así, seguro que es equivocada, porque siempre habrá un informe técnico, una ley superior o unos cientos de votos que nos demuestren que estamos equivocadas... El pueblo se equivoca, ya lo dijo aquel "todo para el pueblo pero sin el pueblo"; pero que lo conozca, que informar le informamos... Y con eso le tendría que bastar.
Es  cierto, información la hay en Internet, en el Getxoberri y en el blog del alcalde..., ¿Y? Pero no está toda la información; no se muestran alternativas posibles -presentadas a veces por la ciudadanía- sino la única, la "verdadera"..., la que avala la decisión tomada, la gestión del gobierno...
Y puedo decir lo que pienso. Eso creo, aunque no estoy segura. Pero eso tampoco es participar. Eso es discrepar, opinar... Participar significa tener poder de decisión, que -más allá de dar mi parecer- pueda decidir incluso cuando no haya más opción que la oficial, porque esa puede estar equivocada...
Pero no voy a echar la culpa sólo a quienes nos gobiernan. La ciudadanía, una parte de ella al menos, no quiere participar. Es el miedo a la libertad del que ya hablara Erich From. Es más fácil no tener que decidir, ser consumidora pasiva...y quejarse en el bar y votar cada 4 años -incluso a los de siempre, total, no vaya a ser que los que vengan sean peores-.
Y... ¿si de verdad empezamos a participar? ¿En nuestras plazas, calles, barrios, redes sociales, centros de jubilados, casas de cltura...? Dejarían de oírnos para comenzar a escucharnos... Y bajarían a la arena a discutir nuestras propuestas, y llegaríamos a consensos y Getxo sería un municipio hecho entre todas y todos... Y no les bastaría que les dieran la Q de Oro de la Transpariencia y la Paricipación sino que la pondrían en práctica con nosotras y nosotros, que dejaríamos de ser meras y meros expectadores para ser autores...
Pero eso, seguro que no lo quieren.

martes, 15 de octubre de 2013

El Gobela, el gran maltratado

Aunque hace tiempo que no llueve y parece estar tranquilo..., el Gobela, ese arroyo de no más de 9 kilómetros que cruza, entre otros, el municipio de Getxo..., vuelve a estar en el punto de mira. Después de las graves inundaciones del 31 de mayo de 2008, y con un retraso de más de veinte años, por fin se comenzaron a realizar las obras de encauzamiento de su cuenca, trabajos que -una vez finalizados- probablemente paliarán los efectos de una nueva avenidad semejante a la de la primavera de hace cinco años (aunque en ningún caso acaben con la amenaza de inundación).
Sin embargo, desde hace unas semanas, las aguas bajan revueltas y se cierne sobre el proyecto la amenaza de paralización como consecuencia de la irresponsabilidad de quienes, tras avalar este proyecto -consensuado por partidos políticos y asociaciones vecinales que representaban a las personas que habían sufrido la inundación- dan marcha atrás y abanderan la lucha por el cubrimiento del río en la zona de Errekagane.
Río arriba, ven con temor esta posible paralización y temen que, tras cinco años de caminar hacia la solución, intereses partidistas hagan que quienes apoyaron ese proyecto se echen atrás y tengan que volver a la senda de las protestas para hacerse ver y reivindicar que todavía queda mucho por hacer para que la amenaza de inundación se convierta en un riesgo asumible (queda casi la mitad del proyecto por hacer, las fases correspondientes a la zona del polideportivo de Fadura -son la sustitución del puente-, así como las actuaciones en Salsidu y Zubilleta hasta el límite con Berango).
Mientras, el Gobela, ahora tranquilo, ajeno a estos tejemanejes de la política municipal, que ha sufrido variaciones de cauce a capricho de las constructoras e intereses urbanísticos, espera a recuperar su lugar, el que le quitaron quienes idearon construir en  Errekagane, Salsidu, Zubilleta, Fadura, Neguri, Aldapas... y tantos otros sitios... Porque lo hará, recuperará su cauce antes o más tarde, en la avenida de los 100 ó los 500, que no sabemos si son las que han pasado o las que están por venir...
Quienes realizan los planes urbanísticos por su parte siguen pensando que ese es un riesgo asumible y continúan proyectando entornos urbanizados en torno al Gobela o a los acuíferos que le nutren (directa o indirectamente) como es el caso de Ibarbengoa, Mimenaga, Zubilleta...

No han aprendido la lección...


domingo, 19 de mayo de 2013

Si fuera posible diseñar el Getxo que queremos...

La revisión del Plan General de Ordenación Urbana, PGOU, de Getxo está en marcha. El anterior PGOU es de 2001, y hay que decir que poco de él se ha cumplido, aunque tal vez eso no sea un drama, vista el ansia por llenar el pueblo de cemento que tienen nuestros dirigentes... (sí lo es que no se hayan edificado ni la cuarta parte de las viviendas previstas en zonas urbanas).
Un PGOU debería tener una vigencia de no más de 8 años, aunque la visión a la hora de redactarlo debería ir algo más lejos, y las personas redactoras debarían pensar en que de lo que vayamos haciendo hoy va a depender el futuro... Y debería haber posibilidades de deshacer lo mal hecho. No valen excusas para no cambiar lo que está mal planificado o para adaptarnos a las nuevas necesidades, expectativas, incluso formas de ver la vida...
Por ese motivo me da un poco de miedo oír a compañeras que han acudido a las reuniones del Lantalde (ese grupo de ciudadanas y ciudadanos que van a poder participar en el diseño del PGOU aunque sea de manera testimonial, no vinculante) que una y otra vez les repiten que el PTP marca las directrices de lo que va a ser el Plan General, que no hay forma de cambiar eso... (buf, si parece que se pueden cambiar hasta las constituciones, ¿no va a ser posible cambiar una ley de rango tan local como un PTP?, no me lo creo), que los Planes Sectoriales condicionan sí o sí el diseño urbano de Getxo...
Tal vez sea así, pero... ¿no es un chocante que vayamos a diseñar algo saliendo de un dibujo ya hecho y que, además, no nos gusta a muchas de nosotras? (me refiero al PTP del Bilbao Metropolitano, diseñado en una época de vacas gordas, de auge de la construcción y la especulación inmobiliaria, con expectativas de gran crecimiento y donde se trata a Getxo y otros municipios de Uribe Kosta como meros barrios-dormitorio de Bilbao). Si no nos gusta, vayamos a cambiarlo... Y empecemos a hacerlo en el PGOU de Getxo... Es decir, vayamos señalando lo que no nos gusta y solicitemos que incluyan esos cambios en el PTP.
Concreto. Tenemos la posibilidad de hacer un diseño desde lo pequeño -barrios y plazas de Getxo- a lo más grande; un plan general desde la dimensión ciudadana -que vive, disfruta, compra, pasea... en Getxo- y no desde un mapa realizado por personas que no conocen qué hay detrás de cada grafía, cada línea, cada recuadro... Partamos de un dibujo en blanco, diseñemos qué queremos y después, veamos si es posible, o si es necesario cambiar los trazados de carreteras, los ptps... para que se adapten a las necesidades de las personas. Y no al revés.
Me temo que eso no es lo que está en el ánimo de nuestros dirigentes, ni tan siquiera en el del equipo redactor. Y por eso, me uno a quienes no se fían y piensan que esto del Lantalde puede ser tan sólo una coartada legitimadora de un proceso que está decidido de antemano.
Me encantaría equivocarme.

miércoles, 15 de mayo de 2013

¡Tengo derecho a una vivienda!



Si hubiera nacido en Europa, quiero decir en el Norte de Europa, no estaría obligada a vivir en casa con mi madre, mi hermana y mi amama; no tendría que tener un compañero o varias compañeras -o viceversa- para poder tener un lugar donde vivir; no debería  hipotecar más de la mitad de mi sueldo durante los próximos 25 ó 30 años para poder tener "mi" vivienda...
Por desgracia he nacido en un pequeño país donde la especulación inmobiliaria está a la orden del día, y desgraciadamente he caído en un municipio donde la inexistencia de una política social de vivienda me condena a emigrar... ¡Y con la cantidad de viviendas vacías que esperan a que los precios vuelvan a subir (en mi comunidad, 3 de 10 viviendas)!
No sé cómo se puede hacer para sacar ese parque de viviendas, pero estoy segura de que, sobre todo, hace falta voluntad para parar la especulación, el mercadeo con uno de nuestros derechos básicos, el de una vivienda digna, además de una fiscalidad que favorezca la puesta en el mercado de alquiler de esas viviendas..., entre otras medidas.
Sinceramente creo que si salieran al mercado de alquiler las más de 2000 viviendas vacías que se calculan en Getxo, además de bajar los precios, se daría respuesta a gran parte de la demanda existente. Si, además existiera una decidida política de ayudas al alquiler dirigidas a las más jóvenes, estoy segura de que frenaríamos el paulatino envejecimiento de nuestro pueblo que nos lleva a una ciudad-geriátrico en un futuro no muy lejano.
Mientras, me bombardean con promociones de viviendas "baratas" a las que sé que no puedo acceder, la última la de una "promoción" en la Galea, me temo que en un suelo que es de todas y que nuestro consistorio ha decidido poner en manos privadas en vez de promover viviendas sociales...

lunes, 13 de mayo de 2013

El porqué de este blog

Hace unas décadas la familia de mi madre decidió que Getxo era el lugar donde quería vivir y crear su familia. Junto a la costa, bien comunicado con Bilbao por tren y carretera, no demasiado poblado, con monte donde pasear, zonas verdes, casas de gran valor arquitectónico, acantilados salvajes, comercio vivo, baserris... Era un lugar ideal para pasear, jugar en la calle.., en definitiva, vivir. Las viviendas no eran tan caras como en Bilbao y los barrios eran más abiertos que en la Capital; la agenda cultural no era tan extensa como en aquella, pero había fiestas y ambiente en sus múltiples barrios.
Hoy, por desgracia, queda poco de ese Getxo; sigue bien comunicado, junto a la Costa, pero han desaparecido algunos de sus valiosos edificios, otros están hechos una ruina, el cemento ha ocupado gran cantidad de zonas de paseo, y se ha convertido en una triste ciudad-dormitorio, con cada vez menos comercio, menos monte, ...y menos niñas y jóvenes...
He leído en el peiódico que el Ayuntamiento tiene pensado redactar el PGOU de Getxo, en el que se va a diseñar cómo va a ser el pueblo en los próximos años, y parece que la gente va a poder opinar sobre ello. Yo no puedo participar en ese grupo de personas que van discutir sobre el Getxo que queremos, pero voy a intentar aportar desde aquí mi granito de arena.
En mis post voy a señalar esas cosas que me gustan y las que no me gustan de Getxo, y qué propondría para mejorarlas... No quiero ser engreída ni pretender tener la razón, pero al menos en estas páginas virtuales voy a darme voz y si alguien quiere escucharme, pues mejor.
Como declaración de principios señalar que mi visión es a  través de mis gafas moradas de feminista, con un deseo de decrecimiento y de utilización de lo existente, sin crear residuos innecesarios, contraria  a la especulación  y al desarrollismo desmedido, joven, ecologista y que apuesta por unas calles vivas, a medida de las personas, de las peatonas, de las ciclistas, de quienes apostamos por el transporte público, por el reciclaje, por dejar a quienes vengan después un Getxo donde quieran y puedan vivir, sin para ello hipotecar su vida, nuestros recursos naturales, nuestros ríos, nuestra costa, nuestros pulmones verdes...